El 7 de febrero de 1983 fallecía en el Hospital de Basurto BENICIO ALONSO GÓMEZ como consecuencia de las gravísimas heridas que sufrió en el atentado cometido dos días antes en la sede del Banco de Vizcaya de la plaza de España de Bilbao. El atentado provocó la muerte en el acto de Ramón Iturriondo García y Aníbal Izquierdo Emperador, y heridas a otras once personas, además de importantes daños materiales.
Benicio era conserje de la sucursal urbana de la calle de Ercilla. El sábado 5 de febrero, día del atentado, se encontraba en la sede central del Banco de Vizcaya para cumplimentar unos trámites. El empleado, que tras el atentado sufrió la amputación de ambos brazos, había sido intervenido quirúrgicamente el domingo 6 de febrero.
El último parte médico antes de su fallecimiento señalaba que sufría "politraumatismo y traumatismo cráneo-encefálico en cuarto grado; quemaduras de segundo grado en cara, cuero cabelludo y ambas piernas; afectación traumática en ambos globos oculares; heridas múltiples por metralla en macizo cráneo-facial, cuello, tórax y extremidades inferiores. Amputación traumática del primer tercio inferior del húmero izquierdo y lesiones traumáticas múltiples, afectando a partes óseas y blandas y extremidad superior derecha".
El anuncio del fallecimiento de Benicio por parte del sacerdote que oficiaba el funeral que se estaba celebrando el lunes 7 de febrero en Bilbao en memoria de las otras dos víctimas mortales del atentado, Ramón y Aníbal, constituyó el momento más emotivo del mismo.
Por este atentado fueron condenados Juan Carlos Echeandía Zorroaza (1984), terrorista que hizo la llamada al banco avisando de la colocación de la bomba, y Josu Amantes Arnaiz (1997) como autor material de la colocación del maletín con la bomba en el interior del banco.
Benicio Alonso Gómez tenía 51 años. Era natural de Barca (Soria), estaba casado y tenía dos hijos.
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