El 6 de noviembre de 1980 la banda terrorista ETA asesinaba en Tarbes (Francia) a la ciudadana francesa JEANINE PUEYO, novia de Josep Zurita, sospechoso de pertenecer a grupos extremistas y de haber participado en el atentado contra el exdirigente de ETA Juan José Etxabe el 4 de julio de 1978 en San Juan de Luz. En este atentado resultó muerta la esposa de Etxabe, Rosario Arregui, que recibió once impactos de bala, y el exdirigente de la banda resultó herido grave al recibir seis disparos. El vehículo del matrimonio fue ametrallado cuando ambos se acababan de introducir en el mismo tras salir del restaurante Etxabe Enea. El atentado fue reivindicado por la Triple A.
Según declaraciones de Etxabe mientras convalecía de sus heridas, en el atentado participaron dos vehículos y, entre los autores, había una mujer rubia que había comido el mismo día del atentado en su restaurante acompañada por un hombre (El País, 09/07/1978). En la colonia de vascos residentes en el sur de Francia se interpretó el atentado contra la familia Etxabe como una posible represalia por el asesinato del periodista José María Portell y otros atentados contra miembros de las Fuerzas de Seguridad.
Josep Zurita fue detenido en la frontera franco-suiza en agosto de 1980 por su presunta relación con este atentado y puesto en libertad provisional sin fianza por la Cámara de Acusación de Pau (Francia) el 18 de octubre de 1980. Zurita aparecía citado en el documento incautado a la dirección de ETA –tras la detención de José Luis Álvarez Santacristina, alias Txelis, en marzo de 1992 en Bidart– como "francés que trabajó para OAS, acusado de atentar contra la familia Etxabe". Pocos días después de que Zurita fuese puesto en libertad provisional, el 6 de noviembre, fue asesinada Jeanine Pueyo, que también había sido interrogada por el juez de Bayona en relación al caso Etxabe.
En el lugar del atentado la Policía gala recogió unos mechones de pelo que demostrarían que la víctima se defendió antes de ser asesinada. El bolso de Jeanine con todas sus pertenencias se encontró en el lugar de los hechos, por lo que se descartó el robo como motivo del asesinato y, en un primer momento, la Policía barajó la posibilidad de un ajuste de cuentas. La víctima había recibido dos tiros de posta.
El asesinato de Jeanine Pueyo fue reivindicado por un grupo denominado Comandos Independientes Especiales de Apoyo a ETA Militar (KIBAETAM), que se había constituido en 1980 y participó en varios atentados, en su mayor parte ataques con bombas y artefactos incendiarios, antes de que una parte de sus miembros se integrasen en ETA. En la edición del 14 de noviembre de 1980 del periódico La Vanguardia se hacía eco de que un comando berezi (especial) de apoyo a ETA Militar había reivindicado el atentado mediante comunicado enviado al diario Egin. La misma referencia a los berezis aparece en el documento incautado a Txelis en Bidart. El historial terrorista de este grupo culminó con el secuestro del secretario general de Partido Comunista de Euskadi, Roberto Lertxundi, en abril de 1981.
Además del asesinato de Jeanine, el atentado contra la familia Etxabe fue utilizado como justificación en otros dos asesinatos de la banda: el cometido el 28 de agosto de 1978 contra el inspector de Policía Alfonso Estevas-Gilmain Muñoz, y los dos cometidos contra Tomás Sulibarria Goitia (el primero dos días después del asesinato de Alfonso Estevas-Gilmain y el que le costó la vida, el 3 de junio de 1980).
Jeanine Pueyo tenía 53 años. Hasta cinco años antes de ser asesinada había vivido en Marruecos. Posteriormente regentó un club nocturno en Torremolinos.
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