A las nueve de la noche del 9 de mayo de 1980 ETA asesinaba en Santurce (Vizcaya) al policía nacional ANTONIO MORENO NÚÑEZ. Antonio se dirigía a su domicilio en Bilbao tras terminar su jornada laborar en la comisaría de Santurce. Circulaba por la calle Cervantes y, al llegar a la altura de la plaza de Vázquez de Mella y detener el vehículo, tres encapuchados que viajaban en otro coche lo acribillaron a balazos.
Antonio fue alcanzado por cinco impactos, uno de ellos en la cabeza. Su coche presentaba varios impactos de bala. Los disparos fueron escuchados por los miembros de una patrulla policial que se encontraba cerca. Cuando llegaron, no pudieron hacer nada por su vida. Los tres terroristas se dieron a la fuga en un vehículo que había sido sustraído a punta de pistola en el barrio de Repelega de la localidad vizcaína de Portugalete.
El cadáver del policía nacional fue trasladado al depósito del Hospital Civil de Bilbao, y la capilla ardiente se instaló en el cuartel de la Policía Nacional de Basauri. El funeral se celebró al día siguiente con la presencia del delegado especial del Gobierno en el País vasco, general Sáenz de Santamaría, y los gobernadores civil y militar de Vizcaya.
Concluido el acto religioso, el féretro fue llevado a hombros por varios compañeros de la víctima hasta el furgón fúnebre, que partió con destino al aeropuerto de Sondica para su posterior traslado, por vía aérea, hasta Málaga. De ahí, fue conducido por carretera a Gaucín, donde recibió sepultura.
ETA reivindicó la autoría a través de una llamada telefónica al diario Egin.
Antonio Moreno Núñez tenía 24 años. Estaba soltero y era natural de Cortes de la Frontera (Málaga). Estaba destinado en Bilbao, donde vivía con su madre, desde dos años antes de su asesinato. Prestaba servicio en la comisaría de Santurce.
No hay comentarios:
Publicar un comentario
Es fundamental recordar y honrar a todas las personas que perdieron la vida o resultaron afectadas por los actos violentos perpetrados por ETA. Cada una de estas víctimas merece nuestro respeto y solidaridad.